Chile igualó a cero con Bolivia en Santa Cruz de la Sierra, en un pleito donde volvió la inconsistencia, la falta de precisión y poder de finiquito y que aumenta las dudas de cara al debut clasificatorio de septiembre en Montevideo frente a Uruguay.
Desde el minuto inicial se vio que tanto las selecciones de Chile y Bolivia buscaron el arco contrario. Tanto así que en el primer minuto de juego Ben Brereton recibió un pase en profundidad y quedó solo frente a Guillermo Viscarra, pero estaba offside.
Los altiplánicos reaccionaron de inmediato, cargando esencialmente por la banda de Gabriel Suazo. Pero una cosa son los deseos y otras la realidad. Ya que las cargas tenían un grado de desorden.
A los 15’ luego de un taco de Alexis Sánchez vino un remate de media distancia de Arturo Vidal que encontró bien posicionado al portero local.
A los 31’ Lucas Chávez capturó la pelota y la puso larga para que por la izquierda corriera Roberto Carlos Fernández que ingresó al área y cuando remató estuvo muy rápido Brayan Cortés para achicar y evitar la apertura de la cuenta. Eran los mejores momentos del combinado verde, cuando Chile se extravió en el control y precisión de los pases y le costaba mucho acercarse a la portería de los bolivianos.
Chile a los 37’ se encontró con un regalo con Diego Valdés, que tuvo todo el campo en solitario a su merced, pero fue un mal contragolpe, remató directo al cuerpo de Viscarra, casi como un pase más que una definición que buscaba el gol. La reacción de los dirigidos de Gustavo Costas fue casi inmediata, y Chávez sin marca alguna recibió un centro que empalmo con la pierna izquierda pero se fue elevado.
En el segundo tiempo se intentó ir más hacia adelante. Pero seguía la imprecisión como tónica. Aunque con tanta insistencia surge algo positivo como el pase que a lis once puso Alexis Sánchez para Valdés que nuevamente no supo resolver. Y a los 15’ Brereton cargó por la izquierda pero no supo si rematar o asistir, y en esa demora Viscarra controló y se diluyó un nuevo ataque.
El partido entró en una laguna, donde ambos equipos naufragaron. Y sólo apareció una opción de peligro a los 33’ cuando Nayel Mehssatou le dio un pase medido a “Alexis” pero que remató desviado y una vez más se desperdició una oportunidad que pudo terminar en la redes
En el cierre se notaba más desgastado a Bolivia. Y Valdés, Alexander Aravena y Sánchez nuevamente inquietaron la última línea del conjunto verde. Pero no hubo forma. El cero a cero no se movió. Y con un rendimiento deficiente volvieron las dudas para el estreno clasificatorio de septiembre, frente al Uruguay de Marcelo Bielsa, que será un rival aún más difícil. Porque tal cual como el frente de lluvia que se avecina sobre la zona central del país, aparecieron las nubes, y la falta de claridad que se vio en el Estadio Ramón Tahuichi Aguilera hace presagiar que el camino para llegar al Mundial del 2026 será arduo, e incluso doloroso.