Nuevamente Colo-Colo en un partido bajísimo perdió en la Libertadores, ante un equipo como Boca Juniors que jugó disminuido, y aun así con poco le ganó justificadamente a los “Albos”, que gracias a la sorpresiva victoria de Monagas sobre deportivo Pereira sigue teniendo chances de avanzar a octavos de final.
Los primeros minutos de un partido muchas veces son una fantasía o un espejismo. Colo-Colo partió con el deseo de meter a Boca en su zona. Pero los Xeneizes en la primera carga a los 3’ casi logran el 1-0. Una vez más Luis Advíncula, el mismo que abrió la cuenta en el Monumental, tuvo total libertad para rematar y Brayan Cortés se exigió para manotear y el balón se fue a uno de sus postes, con lo que evitó la apertura del marcador. Y en esa misma jugada tuvo una lesión muscular Bruno Gutiérrez que obligó a un tempranero cambio. En su lugar ingreso Jeyson Rojas.
A los Diez Colo-Colo también tuvo una clara ocasión por medio de Marcos Bolados que frente a la portería de Sergio Romero desvió su remate que hizo a los miles de hinchas que llegaron a la Bombonera lamentar el grito de gol que venía en camino.
Boca también sufrió con las molestias musculares, a los 13’ Luca Langoni salió lesionado y lo reemplazó Óscar Romero. Un minuto después, a los 14’nuevamente Colo-Colo llegó fondo. Pero entre Bolados y Damián Pizarro no supieron resolver. Igual cosa a los 21’. Donde el ex Antofafasta prefirió la individual más que ceder a Leonardo Gil que llegaba desmarcado por el medio y con más chances de gol.
Después de un largo letargo Alan Varela a los 28’ tuvo una oportunidad de peligro con un remate de derecha de unos 25 metros que pasó cerca del poste diestro de Cortés. Y sobre el cierre del primer tiempo Cortés tuvo dos achiques. Uno a Cristian Medina y el otro a Romero, que mostraron que pese a todo el dominio la defensa del Cacique da muchas licencias. El propio Romero ya festejaba el gol en el cuarto minuto de adición, pero Alan Saldivia salvó desde la línea de sentencia. Así se fueron al descanso igualados, pero con la clara imagen que el dominio sin poder de ataque de nada sirve, y se corre severos peligros una última línea generalmente desconcentrada.
A los diez del segundo tiempo Boca hizo circular el balón. La tocaron varios desde el sector izquierdo. Hasta que Advíncula y Romero dejaron servido toro para el derechazo de Marcelo Weigandt. El 1-0 y tras ello Colo-Colo sintió el golpe. Pero Damián Pizarro de forma inentendible perdió el empate a los 16’ cuando demoró en demasía el remate. Y su falta de gol ya está tomando características de ser crónica, y demostró que la falta de finiquito de Colo-Colo es un problema severo. Jordhy Thompson pasada la media hora entró sólo frente a la portería con balón dominado y sin marca cercana, y desvió el empate que parecía inminente.
Las lesiones en Boca los dejaron sin chance de más cambios, por lo que Advíncula debió terminar el partido muy disminuido en lo físico, aun así ganó varios duelos a los “albos”, que se les vio carentes de rebeldía, sin ideas, un mucho menos hambre de revertir un resultado que estaba a la mano para conseguirlo. Aunque curiosamente la victoria de Monagas 1-0 sobre Deportivo Pereira sigue dejando a Colo-colo con chances de clasificar a los octavos de final de la Libertadores. Oportunidad latente en un grupo de equipos muy discretos, en el que el “Cacique” lo es aún más y demuestra que está lejos del nivel ideal para el plano internacional.