La iniciativa fue aprobada en el Senado, sin embargo, se advirtió que la medida otorgaría garantías a los dueños de terrenos tomados.
La noche de este miércoles, el presidente Gabriel Boric confirmó el vetó a la iniciativa de Ley de Usurpaciones, que fue aprobada en el Senado, tras advertir posibles acciones de legítima defensa privilegiada por parte de dueños de terrenos. La medida, por su parte, busca de crear una normativa que regule la ocupación ilegal de inmuebles y, que establezca penas y mecanismos para su restitución contra la ocupación ilegal de propiedades privadas.
De acuerdo con la decisión del Gobierno, la ministra del Interior, Carolina Tohá, señaló que la medida podría amparar la violencia, en vista de que “este proyecto se ha ocupado para extremar las cosas al punto tal que esta legislación va a permitir ahora que una persona pueda pedir apoyo de terceros para reivindicar con sus propias manos el bien usurpado, defenderse y causando daño de manera ilimitada por lo que dice la ley. Por eso el Ejecutivo ha dicho que va a vetar este aspecto de la ley”.
Es por eso que “así como está, esto no lo vamos a promulgar. Vamos a vetarlo, porque nuestro gobierno es responsable”, confirmó la secretaria de Estado en la Cámara Alta.
Además, agregó que es “nuestra firma, no el anonimato, lo que va a estar detrás de esta ley, y no queremos andar por la vida diciendo que nosotros validamos que la gente, en grupo, con armas, con planificación de meses, vaya a actuar con mano propia”, puntualizó Tohá.
El ministro de Justicia, Luis Cordero dijo a ADN que “hay que tener cuidado con transformar la regulación de usurpaciones en un mecanismo que permita la autotutela”, ya que las fuerzas amparadas ante la ley que estén “reunidas generan un riesgo”.
Sumado a lo anterior, el senador socialista Fidel Espinoza destacó que la avanzada del proyecto “no se puede permitir”, ya que no es posible que “nuestro Parlamento en el año 2023 apruebe una ley que significa un retroceso civilizatorio. Es volver a la década de los 70’, donde había tomas de terrenos porque las personas que no tenían un espacio para vivir, las mataban”.
A pesar el votó que se efectuó en la sesión de la Cámara, el senador Matías Walker explicó que la presentación del veto presidencial es un “saludo a la bandera”, puesto que “lo lógico es que se le pida al juez la orden de restitución del inmueble. De lo contrario, lo que va fomentar es el enfrentamiento armado entre particulares. Yo era partidario de que el pan pasara a Comisión Mixta, perfeccionarlo, llegar a un acuerdo”.
Por su parte, desde la Oposición, el senador Felipe Kast señaló que “el presidente debe responder a la ciudadanía” y “yo creo que la ciudadanía no quiere que el presidente Boric le dé la espalda a quienes quieren, justamente, tener paz con esta ley. Nosotros respetamos esta ley, respetamos las instituciones, respetamos que si el presidente quiere vetar, que lo haga”.
En la misma línea, el senador Javier Macaya expuso que “el gobierno le va a tener que entregar una explicación a las víctimas de un delito tan grave que es pasar por encima del derecho de propiedad”.
Actualmente, los parlamentarios en el Congreso Nacional, en sus puestos, no cumplen con los dos tercios de representatividad, lo que faculta al gobierno a eliminar la legítima defensa privilegiada. Es por esto que la Oposición deberá llegar a un acuerdo con el Ejecutivo, tas la decisión.
Finalmente, la ministra Carolina Tohá se refirió a que en los próximos 30 días presentarán una nueva redacción que no ampare la autotutela en la Ley de Usurpaciones, “que esté bien redactada”, a fin de promulgar la iniciativa que afecta a propietarios de terrenos privados.
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